N°13

Luz y una estela de colores que salen desde el centro mismo de la materia.Haz de brillos que se expande por toda una habitación obscura desde hace unos minutos cuando el decidió apagar la luz.Allá lo esperaba tendida sobre la cama vestida aun, todavía era tímida para desvestirse delante de el y prefería que sea un juego mutuo, se besaron y las ropas volaron por todos lados, cada vez que lo hacían el se encontraba fascinado por la figura que lo acompañaba, era la perfección representada, tocaba como un ciego todo su cuerpo sintiendo cada espacio, su cuello, sus pechos, la panza, las piernas, percibía con cada uno de sus sentidos ese milagro, ella se sentía amada hasta lo mas profundo, y así se fundieron en una sola cosa sin limites ni restricciones, les encantaba poseerse mutuamente, jugar en la cama dejando todo lo que cada uno podía ofrecer, no había cansancio o stress que los contuviera esa rara atracción que tenían los hacia revolcarse por horas llegando varias veces a un clímax total.Eran así, sus cuerpos eran una simetría perfecta que encajaban cada vez que hacían el amor desaforadamente en las piezas de cualquier hotel, ningún prejuicio quedaba en las guanteras de la conciencia, y sus gemidos y respiraciones provocaban una mayor excitación en el otro.Terminaban, se bañaban, cambiaban y partían ella tenia que entrar al colegio a las 14 y a el la excusa por trafico para llegar a la reunión de las 14.30 se le había vencido hace un gran tiempo.Se acomodo la corbata -"te llevo al colegio"-con esa vos de adulto que tanto le gustaba poner cada vez que salían del telo."No, deja voy en bondi, anda que llegas tarde" le dijo y después de un beso en la mejilla partió, si había algo que lo calentaba a puntos extremos era esa falsa inocencia que le mostraba en esos momentos.Entro al auto, prendió el stereo, tiro un poco de aromatizador para sacar el perfume que ella había dejado -le encantaba pero no podía arriesgarse- y lo mas rápido que sus reflejos le permitieron llego al edificio, fue al baño se acomodo el traje se lavo la cara y fijo que no quedara ninguna huella de ese demonio en la cama pero ángel en la vida y entro a la sala donde ya todos lo estaban esperando, que le podían decir, era uno de los pilares y si el quería disponía de ellos, -"disculpen la demora, ero pareciera obra de un demonio no podía llegar, por donde comenzamos", y así la vida continuaba placidamente para el ejecutivo perfecto, con la familia perfecta, se sonrió al ver el sms entrante "por tu culpa me fue mal en la prueba así que ahora la nena tiene que ir al profesor particular"-con un emoticon haciendo puchero-, termino la reunión eran las 18, salio con el auto agarro la autopista y en el camino llamo a casa -"amor, estoy en camino, ¿llevo algo para casa?, bueno besitos a eze, te amo".

"Pequeñas historias de una vida normal"

Pablo Lavandeira

Sean felices :)